Las cocinas blancas continúan siendo las reinas de la fiesta. Es un color tan versátil, con tanta luz y frescura que es imposible cansarse de él.
Lejos de ser una cocina fría, en este proyecto conseguimos aportar mucha calidez. Gracias a la zona de la península, se logra unificar la cocina con el resto de los espacios, creando una zona de reunión familiar.
- En este proyecto se han definido 3 zonas bien diferenciadas:
- Una primera zona de columnas para el frigorífico integrado, electrodomésticos y despensa.
- Una segunda zona de trabajo donde se ha situado el fregadero y la placa de inducción.
- Una tercera zona con triple funcionalidad: almacenamiento + zona auxiliar de trabajo + barra.
El conjunto crea una cocina de líneas sencillas, funcional y acogedora.